Qué bueno es tener amigos

Siempre lo dije, el ser humano no fue hecho para estar solo. Inclusive en la película “Yo Robot” hasta los robots de primera generación  buscaban no estar solos.

Y ahora que vivimos lejos de nuestros mejores amigos de El Salvador, mi esposa y yo hemos tenido que buscar nuevas amistades.

Uno no puede vivir del pasado. Y sería ridículo que yo no tenga nuevos amigos sólo porque hace 2 años deje en El Salvador a mis amigos. Que por cierto se han buscado otros amigos.

Así es la vida.

Debemos practicar el buen hábito de tener amigos. Ellos son los que nos ayudan cuando las cosas no van tan bien, y cuando van muy bien. Son los que llenan nuestras salas hasta altas horas de la noche platicando y compartiendo buenos momentos.

Pero el que tiene amigos debe mostrarse amigo.  No podemos rechazar a las personas cuando sus imperfecciones empiecen a aparecer. Cuando empecemos a ver sus pies de barro, porque,  recordemos, nosotros también tenemos los nuestros y ellos han decidido pasar por alto ese hecho.

Escribo esto en vísperas de que dos parejas de nuestros mejores amigos en El Salvador vendrán a Guatemala a visitarnos. Eso es lo maravilloso de la amistad, que aunque a distancia siempre podemos sentarnos y platicar hasta altas horas de la noche.

Tener amigos es de valientes, porque hay que ser vulnerables. Debemos abrir nuestro corazón y dejar que las personas entren a nuestra vida.

“…y hay amigos más fieles que un hermano.” Proverbios 18:24b